Mitos nutricionales ¿qué son?
Cuando hablamos de mitos nutricionales o mitos en alimentación, aludimos a esas creencias populares, tan arraigadas en la sociedad, que carecen de base científica, pero que de tanto repetirse se da por hecho su veracidad. Lo cual conlleva a que, antes o después, produzcan un cambio injustificado en el comportamiento y en los hábitos alimentarios de muchas personas.
La alimentación es un acto biológico necesario para la supervivencia, pero también tiene una gran parte social y cultural, por ello siempre ha creado un gran interés, que unido a cierta ignorancia, ha favorecido el desarrollo de teorías, opiniones, creencias…que se han ido extendiendo en la sociedad ya sea por el boca a boca, por tradiciones familiares y últimamente por la publicidad a la que estamos sometidos, normalmente sesgada por conflictos de intereses.
Los mitos nutricionales más extendidos.
Existen numerosos mitos asociados a todos los grupos de alimentos, aunque los desarrollaremos más detenidamente en posteriores artículos, veamos cuales son algunos de los más extendidos:
1. No existen alimentos ni buenos ni malos, se puede comer de todo con moderación.
Esta afirmación como tal, NO ES CIERTA.
Existen alimentos saludables que nos ayudan a prevenir ciertas enfermedades y paliar síntomas y hay alimentos no saludables que nos predisponen a sufrir otras.

2. No se pueden mezclar macronutrientes.
Este es uno de los mitos nutricionales más arraigados en la población, sobre todo a la hora de perder peso. Consiste en que no se pueden comer en la misma comida proteína e hidratos de carbono o grasa e hidratos de carbono. Los alimentos en sí ya son una mezcla de nutrientes, entonces es un sinsentido casi imposible de llevar a cabo.
Por lo tanto es totalmente FALSO.

3. Hay que hacer 5 comidas al día.
Este es otro de los mitos nutricionales más extendidos, pero también es FALSO.
No hay consensuado un número determinado de ingestas diarias que sea ideal para todo el mundo.

4. No se puede comer fruta después de comer.
La densidad calórica de la fruta no varía dependiendo de la hora en que la tomemos ni si la mezclamos con otros alimentos, por lo tanto eso de que engorda después de comer NO ES CIERTO.
Tampoco influye en la digestión de otras sustancias.

5. Beber agua entre comidas engorda.
Hay que mantener una buena hidratación y da igual cuando la tomemos. El agua es acalórica y no va a hacer que engordemos por tomarla en las comidas o no, es más, puede producir la situación contraria.

6. Un vasito de vino en las comidas es bueno para la salud.
Entre los componentes del vino se encuentra el alcohol, y para nada el alcohol va a aportar ningún beneficio a nuestra salud, por muy moderado que sea su consumo. Por tanto no podemos decir que sea bueno para la salud.

Llegado a este punto podemos concluir en que los mitos nutricionales no son más que eso, fábulas, leyendas… sin fundamento científico, normalmente falsas, que por mucho que se repitan no van a ganar veracidad.

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